Con información de Agencias
Durante unas horas de la mañana del pasado sábado, un rincón del aeropuerto de Fort Lauderdale-Hollywood se transformó en un colorido escenario. La música y los pastelitos tradicionales cubanos fueron el punto de partida de un numeroso grupo de pasajeros que hacía fila para chequear sus boletos de embarque. Seguir leyendo